Caídas históricas en el consumo de leche, pan y carne

El impacto de la recesión autoinfligida por el gobierno para reducir la inflación a costa del poder adquisitivo de la sociedad viene concretando caídas históricas en consumos tradicionales en los hogares nacionales. Los últimos relevamientos constatan una reducción abrupta de ventas en carne, leche y pan.

En el caso de la leche, la apertura del cupo exportable viene resultando en caída de ventas de leche al mercado interno de 21,9, 19,8 y 23,1 por ciento, con incrementos de 13,6, 20,9 y 55,9 por ciento en las exportaciones de productos lácteos.

El consumo de leche cayó un 15 por ciento en un año producto de la estampida inflacionaria. Por el aumento de precios, mucha gente debió resignar el consumo de leches pasteurizadas, según informaron y ese es un dato muy negativo para la alimentación de los argentinos, dado que es un alimento básico para el desarrollo de los niños y la incorporación de calcio en la dieta, según explica un informe el Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA).

El rubro pan, por su parte, se registra una retracción promedio del 45 por ciento, desde principios de enero último. El dato corresponde a un relevamiento hechos por distintos centros de panaderos que desde entonces piden una reunión con los responsables de la Secretaría de Comercio para ponerle un freno al derrumbe.

La afectación en esta industria puede ser incluso mayor, ya que los coletazos de la eliminación del Fondo Estabilizador del Trigo Argentino (FETA), uno de los fondos fiduciarios que el gobierno de Javier Milei hizo caer, no terminó de repercutir en el precio local de la harina respecto del valor del dólar.

Por último, el caso de la carne: el consumo aparente de carne vacuna habría totalizado 499,7 mil toneladas de res con hueso en enero-marzo del corriente año, resultando 17,6 por ciento menor al registrado en igual trimestre del año pasado (-106,9 mil toneladas res con hueso), marcando el registro más bajo de las últimas tres décadas. Así lo consideró CICCRA (Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados) en un informe reciente.

En enero-marzo de 2024 la industria frigorífica vacuna produjo 745 mil toneladas res con hueso de carne vacuna, es decir 7,6 por ciento menos que en el primer trimestre de 2023. Puesto en términos absolutos, se produjeron 61,2 mil toneladas res con hueso menos.

Sin embargo, considerando que las exportaciones de carne vacuna se mantuvieron en torno a las 85 mil toneladas res con hueso en marzo, en los primeros tres meses del año se habrían exportado 245,2 mil toneladas res con hueso, lo que representaría un aumento de 22,9 por ciento interanual (45,7 mil toneladas res con hueso).

En esa línea, el consumo per cápita de carne vacuna habría sido equivalente a 42,6 kilos/año en marzo de 2024, ubicándose 18,5 por ciento por debajo del verificado en marzo de 2023. En tanto, el promedio móvil de los últimos doce meses del consumo aparente de carne vacuna quedó en 50 kilos/habitante/año en el tercer mes del año, es decir 4,2 por ciento por debajo del promedio de un año atrás.