Massa rompió el silencio en una cumbre de su partido con un duro diagnóstico nacional

Luego de su gestión y campaña al frente del anterior oficialismo, Sergio Massa rompió el silencio con un duro pronóstico sobre la economía argentina: "Vamos a ver un deterioro en la calidad de vida de sectores que no nos votaron", dijo respecto de la política de Javier Milei.

La intervención de Massa fue en el congreso partidario que se realizó la semana pasada y donde se eligieron las autoridades del espacio creado por el exministro de Economía. Lo llamativo fue que sólo estaba confirmada la presencia de la ex titular de Aysa y pareja de Massa, Malena Galmarini.

Según confirmaron los presentes, la decisión de que no trascendiera su mensaje a los medios de comunicación era firme, llegando incluso a la prohibición de la utilización de teléfonos móviles. Claro está, esto no prosperó.

Creo que el problema es, en todo caso, el daño que todos sabemos que a lo largo de este año va a vivir la sociedad argentina por pérdida de puestos de trabajo, por cierre de pequeñas y medianas empresas, por caída de competitividad exportadora de nuestro sector productivo", consignó.

Y recordó que durante la campaña había señalado "los problemas que iba a generar la eliminación del subsidio al transporte, por lo que significaba en su vida en términos de salario indirecto", por ejemplo cuando el ex gobierno colocó el valor de los boletos sin subsidio en los dispositivos SUBE. Y también lanzó una advertencia a quienes ocupan cargos ejecutivos.

"Prepárense los que son intendentes para tener en sus municipios espalda para ayudar a aquellos vecinos que no van a poder pagar la luz y ni les cuento si se confirma el aumento del gas", les dijo.

Si bien se emitieron unos fragmentos breves, quedó en claro cuál es el pensamiento del exministro, que además de hablar de la situación que se viene en términos económicos, también dejó definiciones de autocrítica. "No podemos pensar el futuro sin hacer autocrítica del pasado y esa autocrítica (...) No sobra nadie, pero faltan muchos que piensan como nosotros y que tienen que romper sus prejuicios. Los tenemos que ir a buscar para el abrazo, para construir la nueva mayoría que nos va a permitir volver a gobierno dentro de cuatro años".

Para graficar esa autocrítica, puso como ejemplo al campo. "Cuando empezó la sequía, nos tiramos arriba de los productores con las emergencias, con las transferencias, con los subsidios, con la suspensión del cobro de impuestos. Sin embargo, no lo supimos contar. Casi que lo hicimos con vergüenza", planteó y dijo que a pesar de ello, durante su gestión no hubo un sólo tractorazo.