

La vicepresidenta Cristina Kirchner fue distinguida con un doctorado Honoris Causa en la sede de Viedma de la Universidad Nacional de Río Negro. Allí se refirió a la "ruptura del pacto democrático" ocurrida el 1° de septiembre pasado cuando atentaron contra su vida en la puerta de su domicilio ubicado en Recoleta. Aseguró que hubo "muchos 1° de septiembre" previos a él y que a partir del 2015, se observó "una secuencia lógica" hasta ese día.
La dos veces mandataria resaltó que "odié ser protagonista" del hecho y que en ese ataque se rompió el pacto construído el 30 de octubre de 1983, solidificado el 10 de diciembre de ese mismo año. "Era el pacto de que no se podía ni siquiera pensar en que la supresión del adversario era la supresión de la vida, que estaba bien eliminarlo por ser opositor, desaparecerlo o matarlo. Esto era algo que estaba convalidado por la sociedad y sin embargo, ese 1° de septiembre se rompió", sentenció.
Luego, la dos veces mandataria nacional, abordó el tópico judicial: "Ninguna prueba y un solo objetivo: la proscripción", afirmó en referencia a los fundamentos de la causa Vialidad, que la condenó a seis años de prisión y la inhabilitó para presentarse a cargos públicos. "Lo de los fundamentos de ayer es un eufemismo, millones de palabras y adjetivos, ninguna prueba y un solo objetivo: la proscripción", sentenció la ex mandataria.
En su análisis sobre la situación económica, la vicepresidenta afirmó que "los salarios no generan inflación", al mostrar una serie histórica de datos que compara el nivel salarial con la inflación registrada en cada año.
En ese sentido, detalló: "En 2015, cuando teníamos el salario más alto en dólares en América Latina, la inflación de ese año, medida por la Ciudad, fue del 24 por ciento. Los que me dieron lecciones la llevaron al 54 por ciento". Y agregó: "Primera conclusión para gente que lo único que tiene que hacer es ejercitar la memoria: Está claro que los salarios no son la causa de la inflación, porque con el salario más alto de América Latina teníamos el 24 por ciento y con el salario por el piso y con trabajadores registrados que no llegan a fin de mes".
Por otra parte, la vicepresidenta Cristina Kirchner se refirió a la reestructuración de la deuda y los diferentes acuerdos económicos, apuntando directamente a quienes critican sus formas de gestión. "La apoyé porque creí que la tenía que apoyar, aunque creo que se podría haber hecho una mejor negociación", acotó.
"Hay que terminar con esos clichés que te ponen en un lugar de que sos terca, que sos esto o lo otro, que sos muy ideológica...". Y disparó: "No, creo que he dado muestras de un pragmatismo cuando se trata de los intereses del país que ya no sé que más debería hacer", continuó. "Se van a tener que revisar las condiciones en las que se firmó el acuerdo" con el Fondo Monetario Internacional, en referencia al entendimiento firmado por el entonces ministro de economía Martín Guzmán.
"Los acuerdos no pueden ser como los paquetes de galletitas que se venden igual para todos. Esto es lo que sostuve, sostengo y sostendré. Creo que es importante y se va a tener que hacer, se van a tener que revisar las condiciones en las que se firmó el acuerdo", sentenció.
En ese marco, sostuvo que "parte de la responsabilidad institucional es decir qué puede pasar cuando se firman acuerdos que terminan siendo inflacionarios", afirmando que eso sucede "si en una economía de carácter bimonetario" como la Argentina hay que "ir en la devaluación por arriba de la inflación y la tasa de interés por encima de todo eso, y además tengo que eliminar todos los subsidios a los servicios públicos".
La vicepresidenta expresó que está "convencida" de que "es necesario acordar" y puso el foco en la economía bimonetaria. "Estoy convencida de que es necesario acordar", aseguró. Cristina Kirchner propuso discutir cuál será el patrón de acumulación "para tener los dólares para hacer frente, no solamente a las obligaciones, sino la de las del desarrollo y el crecimiento que demanda nuestra sociedad". Sobre eso, ahondó: "Hay que sentarse a hablar de eso,sin adjetivaciones, sin estereotipos, ni clichés".
En sentido del debate político que considera necesario, explicó: "Se trata de aportar ideas y discusiones. No podemos seguir en un debate tan chato y tan mediocre y tan manejado desde los medios de comunicación". Y cerró: "No nos lo merecemos y sobre todo ustedes, estudiantes de universidades públicas".