

El presidente realizó su última intervención –al menos de este mandato- en las aperturas de sesiones ordinarias en el congreso de la nación. El mandatario abarcó una amplia gama de temas es un discurso no tan prolongado.
"¿Alguien cree realmente qué tiene un futuro mejor si se imponen políticas de ajuste, reducción de derechos y una mayor concentración de ingresos?", preguntó el Jefe de Estado, e indicó, en referencia al gobierno macrista: "esto ya se intentó y conocemos los resultados. Hoy nos lo siguen proponiendo con el agravante de que nos anuncian más rapidez y más profundidad".
"Hay mucho tramo por recorrer. Pero eso sucederá si continúan estas políticas que ponen en el centro al trabajo", advirtió.
Sin parar ante las interrupciones de la bancada opositora, el Presidente cuestionó la sentencia contra Cristina Kirchner en el juicio por la obra pública en Santa Cruz, que la condenó a 8 años de prisión e inhabilitación para ejercer cargos públicos.
“Lo hicieron tras simular un juicio en el que no se cuidaron las formas mínimas del debido proceso y se formularon imputaciones que rayan con el absurdo jurídico buscando su inhabilitación política”, puntualizó.
Sostuvo que los fundamentos de ese fallo “repugnaría” a la dogmática del derecho penal y dejó claro que “los tribunales aún tienen tiempo de reponer el imperio del derecho y acabar con tantas tropelías cometidas invocando a la Justicia”.
“Levantamos nuestra voz porque el reclamo de justicia cobra vigencia una vez más cuando el derecho se tuerce por el odio y la persecución política”, cuestionó.
"Yo invito al pueblo argentino y a todas las fuerzas políticas a que procuremos mirar hacia adelante", dijo el mandatario, llegando al fin de su discurso. "Estamos todos en un mismo barco que no puede naufragar. Nadie se salva solo, diría el Papa Francisco", recordó. Y enumeró las intenciones para este año:
"Queremos seguir con la Argentina avanzando hacia un desarrollo sostenido, potenciando la industria, redistribuyendo con equidad los ingresos, ampliando derechos y cuidando el ambiente".
"Queremos aumentar las exportaciones y aumentar el consumo interno. Queremos más trabajo de calidad. Queremos seguir fortaleciendo a nuestras Pymes que son las que generan 3 de cada 4 empleos. Queremos profundizar las políticas de inclusión laboral. Peleamos todos los días por una sociedad más igualitaria. Debemos hacer realidad nuestra utopía de Justicia Social".
"Venimos demostrando que podemos hacer crecer la economía sin menguar derechos de los trabajadores. Es falso que para crear trabajo o mejorar los ingresos deba retrocederse en derechos".
"Estuvimos de rodillas. Pudimos ponernos de pie. Ahora que volvimos a caminar no dejemos que las diferencias políticas coyunturales las pague nuestro pueblo. Allí donde sea posible avanzar, avancemos", propuso el mandatario.
"En virtud de ello, y de cara a un año que tendrá sus peculiaridades por el proceso electoral en curso, hago un pedido para que no condicionemos la aprobación de proyectos de leyes que los argentinos están necesitando. (...) Con barullo político no sé quiénes ganan. Sí sé que pierde nuestra gente", opinó, en en mensaje a los legisladores y legisladoras de la oposición.
"No somos nosotros quienes atentamos contra la Constitución", dijo el mandatario. "Los que atentaron contra la Constitución son los que armaban mesas judiciales y perseguían con recursos estatales a jueces, a periodistas, a políticos opositores y hasta a sus propios compañeros", consideró.
"No pretendan ahora dar lecciones de institucionalidad y fervor democrático. Solo quiero dejar en claro quien respeta la República y quién no. Nosotros no designamos jueces integrantes de la Corte Suprema por decreto", señaló, en un mensaje a Mauricio Macri.
Y siguió, apuntando al expresidente: "Tampoco tergiversamos leyes mediante decretos reglamentarios para que nuestros parientes puedan blanquear dinero. Nosotros no trasladamos jueces e integramos Cámaras para incidir en causas en las que se persiguen políticos opositores. No son nuestros funcionarios los que se pro fugan de la Justicia alegando persecuciones".
"El accionar de los miembros de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, nos llevó a presentar un pedido de juicio político ante la Cámara de Diputados", destacó el mandatario.
Dijo que cualquier argumento "que sostenga que el reclamo es violatorio de la República o del Estado de derecho, es falso. Solamente tienen que ir y leer el artículo 53 y 59 de nuestra Constitución Nacional", agregó, al tiempo que aclaró que "no hay ningún ataque ni embestida contra la Justicia" sino que "se solicita que se revise con todas las garantías y en las instancias que corresponde el desempeño de los magistrados que conforman la Corte Suprema de Justicia de la Nación". En ese sentido, insistió en que no pretende "descalificar en su totalidad al Poder Judicial por las conductas de algunos de sus miembros".
"Conozco la honestidad de muchos magistrados y funcionarios judiciales. Pero no podemos seguir mirando impávidos cómo las disputas palaciegas desatadas en el más alto tribunal del país por controlar el manejo de los recursos económicos del Poder Judicial acaban desatando abusos inadmisibles", sumó.
En sus críticas al Poder Judicial, Alberto Fernández se refirió al escándalo de las escuchas que develaron “la connivencia entre algunos magistrados, empresarios de medios de comunicación, ex agentes de inteligencia y políticos”.
“Lamentablemente, el Poder Judicial hace tiempo que no cuenta con la confianza pública, no funciona eficazmente y no se muestra con la independencia requerida frente a los poderes fácticos y políticos”, lanzó ante el griterío de la oposición de derecha que defiende a la corporación judicial.
A través de casos como ese, “se impuso así una práctica que permitió, una y otra vez, burlar la ley mediante medidas cautelares”. “Frente a este estado de situación es necesario tomar cartas en el asunto y trabajar para encontrar su solución”.
Recordó que para solucionar estos problemas, el gobierno propuso una reforma “que se aprobó en el Senado y nuca fue tratada en la Cámara de Diputados”.
Además, agregó, “este mismo Congreso debió soportar la intromisión en sus prerrogativas cuando la Corte Suprema se arrogó indebidamente la facultad de disponer” sobre la designación de miembros del Consejo de la Magistratura. “La gravedad institucional que todo eso supone es mayúscula. Quiero llamar la atención de todos los argentinos y argentinas sobre esto”, sentenció.
"Prometí al asumir la Presidencia que pondría fin a los sótanos de la democracia y lo hice. El personal de inteligencia del Estado ya no se vincula con los jueces", remarcó Fernández.
"Los recursos de la Agencia Federal de Inteligencia son públicos y no existen operadores que en nombre del gobierno compran voluntades judiciales", dijo, mientras el griterío en el recinto seguía. Y continuó: "Por impulso del Gobierno Nacional, no hay escuchas ni intromisiones en la privacidad de ningún ciudadano. El espionaje interno ya no existe. Todos y todas pueden pensar libremente sin temer el acoso del poder estatal".
"La intromisión de la Justicia en la ejecución presupuestaria es definitivamente inadmisible. Excede sus facultades, olvida la regla jurisprudencialmente fijada que reconoce 'cuestiones políticas no judiciables' y pone en riesgo la lógica redistributiva de la Ley de Coparticipación Federal causando un severo daño al equilibrio de las cuentas públicas", añadió en un recinto convulsionado.
"Los episodios recientes en la disputa por los recursos nacionales y su coparticipación con nuestras provincias hicieron evidente cual es el bloque de intereses tradicionales que pretenden consolidar las enormes asimetrías que aún existen en la Argentina", observó Fernández.
Y luego apuntó contra la Corte Suprema, mientras en el recinto se escuchaban aplausos y abucheos: "mientras que muchas provincias necesitan realizar obras que permiten asegurar servicios tan esenciales como el agua potable para sus habitantes, la Corte Suprema de Justicia aseguró cautelar a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires recursos coparticipables que no le corresponden contrariando la ley de coparticipación vigente. Le quita dinero a los que más necesitan y destina esos mismos recursos a la ciudad más opulenta del país".
"Es nuestro objetivo estratégico la construcción de un verdadero federalismo", subrayó Fernández, quien recordó que cuando asumió la presidencia dijo que "gobernaría junto a todos los gobernadores y las gobernadoras de las provincias".
"Lo hice en los duros momentos de la Pandemia y lo sostuve después recorriendo con mis ministros, en muchos casos en más de una oportunidad, todas las provincias. Desde el caluroso impenetrable chaqueño hasta la gélida Antártida", aseguró.
En materia de Defensa, puntualizó que “la jerarquización de las Fuerzas Armadas es un imperativo impostergable” e indicó que los lineamientos que se fortalecerán apuntarán a “capacitar, recomponer sus ingresos y fortalecer su equipamiento”. “Esos deben ser nuestro objetivo de trabajo” para las áreas que trabajan en “la preservación del territorio y soberanía”.
En el discurso de este miércoles, el jefe de Estado expresó su "orgullo" al "poder decir que en estas últimas semanas se han iniciado las fases 2 y 3 de los estudios clínicos de la vacuna contra el Covid desarrolladas por el CONICET, la Universidad de San Martín y la Agencia de Investigación del Ministerio de Ciencia y Tecnología". "Es la primera vez que el desarrollo de una vacuna nacional llega a esta etapa", celebró.
Al repasar lo hecho en materia educativa, el mandatario ponderó la ampliación de una hora más de clase por día, que ya se aplica en 22 provincias; el programa Conectar Escuelas, que lleva internet en las aulas, para el cual “se distribuyeron más de 7 millones de estudiantes y cuando termine este año habremos entregado 1 millón de computadoras entregadas” a estudiantes.
También mencionó los programas de entrega de becas, libros y sostuvo que “cuando quieran ver por donde va un gobierno, miren la educación”.
En este sentido, anunció que el Poder Ejecutivo enviará al Congreso el proyecto de Ley de Expansión de Inversión Educativa, que tienen como objeto incrementar el presupuesto educativo del 6 al 8 por del PBI en diez años.
En materia de ciencia y tecnología, el mandatario opinó: "depende en gran medida del modo en que nuestras políticas favorezcan el desarrollo de la ciencia y la tecnología".
En ese sentido, aplaudió las políticas de su gobierno en este sector. "En 2022 la inversión en ciencia se incrementó un 16% en términos reales, por sobre la inflación. Durante este ejercicio tenemos previsto un nuevo incremento del 32% real en los términos del proyecto votado por este Congreso", detalló. Con estos recursos, se lanzaron los programas “Equipar Ciencia” y “Construir Ciencia”.
Además, "en estos años hemos recuperado más de 30 puntos en términos reales el poder adquisitivo de los sueldos de los investigadores del CONICET y casi 40 puntos los estipendios de sus becarios, así como también hemos ampliado e incrementado sustancialmente los ingresos de cada convocatoria", enumeró.
Durante el cierre de su discurso, el jefe de Estado reconoció que el 10 de diciembre, cuando culmine su mandato, “habrán tenido un presidente que le puso el pecho a cada problema que enfrentó, con aciertos y errores”.
Luego propuso que así como hace 40 años “nuestra utopía fue la democracia, ahora la utopía debe ser la igualdad”. “Construimos la democracia, vivimos en libertad, alcancemos la igualdad”, dijo y sostuvo que para el Frente de Todos, “gobernar es generar igualdad”.
Además, llamó a la oposición “a dar vuelta la página del tremendismo y el desánimo”, y “arremangarse y trabajar”. Y pidió a los funcionarios tener “compromiso con la patria” y al resto de la clase política a “dejar de lado las mezquindades, las pequeñas rencillas, los narcisismos”.
“Quiero invitarlos a un compromiso de trabajo serio y cotidiano con nuestro país. No podemos quedarnos esperando que el mundo nos ayude. La Argentina debe ayudarse a sí misma”.