

La inflación de febrero se ubicó en 2,4%, evidenciando una aceleración respecto al registro de enero. En el primer bimestre del año, la variación acumulada alcanzó el 4,7%, mientras que en la comparación interanual, el incremento fue del 66,9%.
La división de mayor aumento fue vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, con un incremento del 3,7%, impulsado por alzas en el alquiler de la vivienda y servicios públicos. Le siguió alimentos y bebidas no alcohólicas con una suba del 3,2%, principalmente debido a aumentos en carnes y sus derivados.
Por otro lado, las divisiones que registraron las menores variaciones fueron equipamiento y mantenimiento del hogar (1%) y prendas de vestir y calzado (0,4%).
En cuanto a las categorías del IPC:
IPC Núcleo lideró con 2,9%.
Regulados aumentaron 2,3%.
Precios estacionales cayeron 0,8%.
En febrero, la variación mensual de la canasta básica alimentaria (CBA) fue del 3,2%, mientras que la canasta básica total (CBT) subió 2,3%.
Las variaciones interanuales fueron:
CBA: 45,0%.
CBT: 53,1%.
En el acumulado del año:
CBA: 4,2%.
CBT: 3,3%.
Para no ser considerada pobre, una familia tipo de cuatro integrantes necesitó $1.057.923. Para no ser calificada como indigente, requirió $468.108.
Luego de una pausa en enero, en febrero el precio promedio del animal comercializado en el mercado de Cañuelas registró una suba significativa del 8,7% mensual, según la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados (Ciccra).
Las alzas fueron impulsadas por los novillos, vaquillonas y novillitos, con incrementos de dos dígitos en cada caso:
Novillos: +14,9% ($2.583,1 por kg vivo).
Vaquillonas: +14,4% ($2.724,3 por kg vivo).
Novillitos: +13,0% ($2.802,5 por kg vivo).
Según el INDEC, los cortes de carne presentaron las siguientes subas:
Asado: +9,9%.
Carne picada común: +11,3%.
Paleta: +12,6%.
Cuadril: +13,1%.
Nalga: +13,6%.
El menor volumen de animales comercializados explicó en parte la suba de los precios en el mercado cárnico, lo que impactó directamente en la inflación general del mes.
Conclusión El dato de inflación de febrero mostró una aceleración en los precios, con fuertes subas en los rubros de servicios y alimentos, en especial la carne. La presión inflacionaria continúa alta en un contexto de menor crecimiento de los precios estacionales y un comportamiento dispar entre las diferentes divisiones del IPC.