Las intensas tormentas de los últimos días en el norte argentino causaron destrozos en rutas nacionales y provinciales de Jujuy, Salta y Tucumán, mientras se hace esperar la ayuda de Nación. Las arterias más afectadas fueron las rutas nacionales 51, en Salta; la 9, en Jujuy, que atraviesa la Quebrada de Humahuaca, y la 40, en varios tramos en la zona de los Valles Calchaquíes. En la capital jujeña suspendieron las clases por falta de agua en las escuelas y colegios.
En Jujuy, las precipitaciones de la semana pasada y que se extendieron hasta el fin de semana afectaron la ruta nacional 9/34, por lo que hubo cortes en la Quebrada de Humahuaca, a la altura de Purmamarca, Tilcara y Huacalera. En esta provincia, la RN 40 estuvo intransitable desde Susques hasta Puesto Sey, en la zona de la Puna.
En las zonas críticas, la interrupción del paso de vehículos se extendió durante varias horas hasta que se habilitaron de manera parcial, mientras maquinaria pesada despejaba las rutas de rocas y barrio. Se evitó, además, circular por las noches, de acuerdo a la información oficial.
En el orden provincial, la intempestiva crecida de arroyos derrumbó parte de los puentes de las localidades de Los Molinos y Huaico, e inundó algunas zonas de la yunga jujeña pero no hubo víctimas.
En Salta los problemas más graves se produjeron en la ruta nacional 51, que une el oeste de esta provincia con el sudoeste Jujuy. Su recorrido de 283 kilómetros, desde el aeropuerto salteño hasta el Paso Sico, a 4092 metros sobre el nivel del mar, une La Silleta, Campo Quijano y San Antonio de los Cobres, una región en donde está en pleno desarrollo la minería del litio. La RN 51 corre paralela, en algunos tramos, al Tren a las Nubes.
En Tucumán cayeron 130 milímetros de lluvia en casi tres horas, durante el sábado, por lo que también se produjeron anegamientos con autos arrastrados, sobre todo, en San Miguel de Tucumán, pero no hubo víctimas. Sí se registraron derrumbes en la ruta nacional 307, que permite acceder al municipio de Tafí del Valle, a 2.000 metros sobre el nivel del mar, por lo que la circulación estuvo cortada por precaución durante algunas horas.