

Durante la primera apertura de sesiones del actual mandatario nacional, Javier Milei, anunció -entre eslóganes más asociados a la campaña y anuncios de anuncios- el cierre de la agencia de noticias nacional, Télam.
Ante la avalancha de complicaciones diarias generadas por los últimos años de problemas macroeconómicos y potenciados a niveles insólitos por las medidas de impacto recesivo inédito en las últimas décadas efectuadas por actual gestión, el anunció de la clausura de la citada agencia de información pública parece no despertar el impacto que semejante decisión tiene en la vida de la sociedad argentina.
¿Qué son las agencias de noticias?
Se las conoce con ese nombre, o también como agencias de información, a los entes u organizaciones destinadas a recabar información sobre acontecimientos en comunidades a lo largo de un extenso territorio; la cual es recopilada por corresponsales desperdigados por el mismo, y luego procesada y envíada desde un centro -generalmente a través de cables- a los diversos agentes encargados de divulgarlos ya sea a través de medios de comunicación de consumo masivos o intra organizaciones de terceros.
Dentro del ámbito de ejercicio de estas actividades, se destacan, además de la que motiva este artículo, Agence France Presse (AFP), Reuters, Associated Express, Sputnik, Xinhua, EFE, etc.
Télam y la influencia fáctica en la información.
Nacida el 14 de abril de 1945 por iniciativa del entonces secretario de Trabajo y Previsión Social de la Nación Juan Domingo Perón, en la postrimería de la Segunda Guerra que, con horror manifiesto, había desgarrado a la humanidad y reconfigurado la geopolítica planetaria.
El objetivo fundacional de la agencia aún se mantiene intacto: el fortalecimiento de la soberanía informativa desde la identidad nacional que pone por sobre todo el acceso y la circulación de la información en manos del conjunto de la sociedad como un derecho humano irrenunciable en contraposición a los fines comerciales de un sistema de medios tradicional que se fue concentrando a lo largo de este tiempo y que, en la actualidad, exhibe más que nunca cómo los intereses extra periodísticos definen sus agendas.
Más allá de la relevancia de la agencia en materia de material historiográfico, la empresa estatal es desde hace décadas la única del rubro informativo en contar con corresponsalías en todos los territorios provinciales, sumando, además, una sede itinerante en la Antártida. En total, al día de hoy, cuenta con más de 50 cronistas distribuidos en 27 corresponsalías en todo el país, -además de cuatro en el exterior: Chile, Brasil, Londres y Vaticano- con una producción diaria de las distintas áreas destinados a unos 800 abonados. A esto, el área Télam Digital suma un servicio de contenidos de acceso libre desde su sitio web y redes sociales.
La confiabilidad, la trazabilidad de la información y la velocidad de tratamiento del contenido convierten a Télam en fuente primordial y fidedigna de absolutamente todos los portales, diarios, medios televisivos, radios y streamings nacionales. De allí que su cierre expone a la población a un impacto insospechado e inabarcable en el tratamiento de datos de la actualidad.
Las reacciones.
El Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) y la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa (Fatpren) remarcaron en un comunicado que Télam "demuestra su calidad y profesionalismo con el servicio que brinda a diario y es utilizado por todos los medios privados del país", y que su cierre "no sólo sería ilegal sino también ilegítimo" y que encarnaría "un ataque a todo el sistema de medios, público y privado, al pluralismo y al federalismo".
A través de un comunicado, el Foro de Periodismo Argentino (Fopea) remarcó que los medios públicos "pueden y deben cumplir un rol determinante en la construcción de audiencias más críticas y mejor formadas, con inclusión y equilibrio de voces".
En tanto, el Sindicato de Trabajadores de Prensa (Sitrapren) sostuvo en un comunicado que "Télam es un medio de comunicación que le pertenece a todos los y las argentinas y que ocupa un lugar central como productor de información pública y nacional que hace a la democratización informativa".
El secretario General de la CTA Autónoma, Hugo Godoy, expresó su solidaridad y remarcó que "los medios de comunicación públicos son medios democráticos que deben estar al servicio de las mayorías populares y ser un instrumento contra la concentración y monopolio de los grandes grupos económicos que manejan la Argentina".
El secretario General de ATE Nacional, Rodolfo Aguiar, expresó que "la idea de cerrar la agencia nacional atenta contra la libertad de expresión, vulnera el derecho a la información de los ciudadanos y avanza en la estigmatización de los periodistas lo cual es un retroceso de magnitud para la vida democrática del país"; mientras que su par de ATE Capital, Daniel Catalano, destacó que "Télam es soberanía de información y quienes la garantizan son sus trabajadores".
La Unión General de Asociaciones de Trabajadores del Transporte (Ugatt) subrayó en un comunicado que Télam "representa el espíritu en el ejercicio del derecho a la información de todos los trabajadores, fomentándolo durante numerosos gobiernos de distintas ideologías, desde hace ya casi 80 años".
"Desde CTERA nos solidarizamos con las y los trabajadores de prensa de Télam y estaremos junto a ustedes resistiendo este atropello a la libertad de expresión. Este ataque tiene como principal objetivo acallar una usina de información histórica", indicó en un comunicado la Confederación de Trabajadores de la Educación.
A su vez, diferentes sindicatos de la salud expresaron su solidaridad a través de un documento donde, por ejemplo, la presidenta de la Asociación de Licenciados en Enfermería (ALE), Andrea Ramírez destacó: "En cada movilización en defensa de nuestros derechos como trabajadores de la salud por nuestro reconocimiento, ahí estuvieron las y los compañeros de Télam ayudando a difundir nuestros reclamos. Así como han estado en cada lucha, vamos a estar en las calles junto a sus trabajadores defendiendo los puestos de trabajo".
El premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, compartió un video donde expresó "a todos los compañeros de Télam toda la solidaridad y el apoyo tanto de mi parte como del Serpaj de Argentina y América Latina" y agregó: "Lo que dice el presidente Javier Milei es una ofensa a la libertad de prensa y a todo el pueblo".
La Fundación Igualdad publicó en su cuenta de X: "La @AgenciaTelam cumplirá 80 años de trayectoria en #Argentina y el mundo. La #democracia debe celebrar su rol imprescindible para garantizar el derecho a la información, la soberanía informática, la libertad de expresión y a les trabajadores".
Así amanecimos en Télam#NoAlCierreDeTélam pic.twitter.com/P6kxT4rdWn
— Leandro Iankelevich (@liankelevich) March 4, 2024
El colectivo Ni una Menos remarcó en X: "Toda la solidaridad con las trabajadoras de @AgenciaTelam, imprescindibles en el camino por una comunicación feminista".
El Director del Instituto Consenso Federal, Alejandro "Topo" Rodríguez, sostuvo en su perfil de X que "la continuidad de TELAM debe ser defendida con todas las herramientas legales y democráticas al alcance de la sociedad argentina".
El ex diputado aseguró que el anuncio de Javier Milei "no tiene ningún valor legal, pero constituye una seria y grave amenaza para la continuidad de la Agencia, tan o más grave que las amenazas disparadas por el gobierno de Mauricio Macri".
El presidente del Frente Nacional de Agrupaciones Peronistas (Frenap), Marcelo Puella, consideró que "Télam no es para los argentinos sólo una agencia de noticias, es parte de nuestra soberanía" y que "cualquiera que tiene memoria sabe lo que significó para nuestro pueblo".
"Queremos expresar nuestra solidaridad con los trabajadores de la Agencia Télam que están sufriendo un nuevo ataque por parte del presidente Milei que ha decidido cerrar un medio de comunicación federal y democrático", dijo el Secretario General de la UTEP, Alejandro Gramajo.
La dirigente nacional de Libres del Sur, Silvia Saravia consideró que Télam "es fuente de información para miles de medios de comunicación" y que sin ella "perderíamos soberanía informativa quedando a merced de los medios privados y sus intereses".
Por su parte, Bernarda Llorente -ex presidenta de la agencia nacional de noticias(2019-2023)- también se expresó al señalar que "Milei pretende cerrar Telam en contra de un periodismo de calidad, plural,federal, veraz,que facilita la multiplicación de medios y voces en todo el país". En el mismo sentido, recordó: "La reconstruimos desde sus ruinas. No toleremos semejante restricción a la libertad y a la expresión."
"Nadie que haya trabajado en la redacción de un diario, una radio, un canal de noticias, puede desconocer el valor práctico e incalculable que tiene Télam en la producción y federalización de información. Borrarla del mapa es un ataque a todo el periodismo. Télam no se cierra", dijo el escritor y periodista Daniel Mecca.
"Cerrar la agencia Télam es, antes que nada, de ignorantes", dijo la escritora Claudia Piñeiro, mientras que la periodista y escritora, Natalí Schejtman, evaluó el impacto que podría tener en el sector privado: "Si cierra Télam, los medios privados van a dejar de tener un porcentaje importante de las notas y de las fotos que usan, por ejemplo".