Ante el presunto rechazo de la Ley Onmibus que envió el Gobierno nacional en el Congreso, que también en su contenido tiene el paquete de medidas incluidas en el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), el presidente Javier Milei aseguró que tiene un plan B para intentar completar su desregulación de la economía y lo afirmó en una entrevista en televisión con el periodista Luis Majul, donde el mandatariodijo que de ser rechazado en el Congreso, enviará el DNU a ser votado por la población en un plebiscito.
"Que los legisladores me expliquen porque el Congreso se pone en contra de algo que le hace bien a la gente", apuntó Milei tras responder que "obviamente" llamará a un plebiscito si rechazan su DNU. En ese sentido, fue muy duro con los que ya adelantaron su negativa a aprobar el Decreto: "El problema es que no les gusta, pero no lo pueden decir abiertamente o quieren hacer algun negocio con alguna ley y con el DNU no pueden morder. Hay legisladores que buscan coimas", expresó el libertario.
A su vez según Javier Gerardo "el DNU tiene un 75% de aprobación", pero no mencionó ninguna fuente de ese dato, seguro sacará ese porcentaje por twitter, cuando hay millones de cuentas que son truchas y se encargan de dinamitar todo el tiempo en contra de distintas fuerzas políticas y en apoyo al Presidentel. El anuncio del Decreto impulso multiples movilizaciones autoconvocadas y una marcha de la CGT que se realizará este miércoles.
El presidente Milei promulgó la semana pasada un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) de 366 artículos con fuertes reformas de desregulación del Estado. Aunque la medida entrará en vigencia el 29 de diciembre, todavía debe pasar por el Congreso que tiene la potestad para rechazarlo. El oficialismo, con una clara debilidad legislativa, debe reunir mayoría simple en al menos una de las dos Cámaras para que el decreto tenga cause legal.
Con este panorama, y apenas horas después de la sanción de esta normativa, distintos sectores opositores adelantaron que no votarán a favor del megadecreto en el Congreso y el objetivo del Gobierno podría quedar obstaculizado.
