

El gobernador de Neuquén, Rolando Figueroa, entregó este jueves a la petrolera de capitales colombianos GeoPark las concesiones no convencionales (Cench) de los bloques Puesto Silva Oeste y Loma Jarillosa Este, ubicados en la formación Vaca Muerta. La compañía desembolsará US$115 millones para concretar la operación, que marca su desembarco definitivo en la principal cuenca no convencional del país.
El acuerdo incluye cerca de 12.300 acres brutos en la ventana de crudo negro de Vaca Muerta, con un recurso recuperable estimado de más de 60 millones de barriles y concesiones con vigencia superior a 30 años. La fecha de efectividad se fijó en el 1 de enero de 2025.
Bloque Puesto Silva Oeste: 6.301 acres, nueva licencia de explotación con 35 años de vigencia y autorización de transporte. GeoPark se quedará con el 95% de participación operada, mientras que Gas y Petróleo de Neuquén (GyP) recibirá el 5% restante, bajo la modalidad de carry recuperable.
Bloque Loma Jarillosa Este: 6.054 acres con licencia vigente hasta 2057.
Precio: la transacción supone una valoración de US$9.550 por acre.
Producción actual: entre 1.700 y 2.000 boepd (95% petróleo – 5% gas). Con esta adquisición, GeoPark elevará su producción consolidada en Argentina a 30.000 boepd en 2025.
El CEO de la compañía, Felipe Bayón, destacó que se trata de un “hito histórico para GeoPark”, que permitirá “incorporar producción inmediata, mayores reservas y un valor significativo a largo plazo”.
La concesión de Puesto Silva Oeste había caducado la semana pasada en manos de Pluspetrol, tras la decisión del gobierno neuquino de dar de baja el permiso por incumplimiento del plan piloto de inversiones. Fue la primera vez en la historia que la provincia retiró una concesión no convencional por esa causa.
GeoPark apunta ahora a alcanzar un plateau de 20.000 boepd hacia 2028, con reservas 2P estimadas en 25,8 millones de barriles y recursos contingentes 2C de 44,2 millones, lo que representa un fuerte potencial de desarrollo. Según las proyecciones, los activos podrían aportar entre US$300 y US$350 millones de EBITDA Ajustado bruto anual a un precio de Brent de US$70.
El desembarco se produce luego de un frustrado intento en 2024, cuando la petrolera no logró avanzar en un acuerdo con Phoenix Global Resources por la falta de aval provincial. Esta vez, con el aval directo del gobierno neuquino y un aporte de capital de más de US$100 millones a su filial argentina, la compañía concretó finalmente su entrada a Vaca Muerta.