domingo 17 de agosto de 2025 - Edición Nº2447

Internacional | 16 ago 2025

Geopolítica

Todo lo que dejo la cumbre entre Trump y Putin: sellaron un “principio de entendimiento” en Alaska, pero sin acuerdo de paz definitivo

El clima distendido incluyó gestos diplomáticos: la llegada con alfombra roja, un apretón de manos ante la prensa y la invitación de Putin para que la próxima cumbre se realice en Moscú.


El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su par ruso, Vladimir Putin, se reunieron este viernes en la Base Conjunta Elmendorf-Richardson, en Anchorage, Alaska, en lo que fue el primer encuentro bilateral desde la Cumbre del G20 en Japón en 2019 y, también, desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania.

 

La cumbre, que se extendió por más de dos horas y media bajo un esquema de negociaciones reducidas, culminó con un mensaje común: el deseo de que los acuerdos alcanzados sean “el principio de la solución del conflicto ucraniano”. Sin embargo, no se anunció un cese de hostilidades ni un tratado de paz inmediato.

 

Putin abrió la conferencia de prensa posterior afirmando que “era importante salir de la confrontación y entrar en el diálogo”. El líder ruso destacó que la reunión en Alaska tenía una carga simbólica, al subrayar que Estados Unidos y Rusia son “vecinos cercanos” separados solo por el mar de Bering.

 

El mandatario ruso fue enfático: “Si Trump hubiera sido presidente, no habría habido guerra”. Además, advirtió a Europa que no intente “torpedear el progreso incipiente” y planteó la necesidad de una solución sostenible que contemple los intereses de Rusia y reequilibre las fuerzas en Europa.

 

Trump, por su parte, calificó la relación con Putin como “fantástica” y la reunión como “muy productiva”. Reconoció que se alcanzaron avances, aunque subrayó que no existe aún un acuerdo definitivo: “No hay acuerdo hasta que haya un acuerdo”, sentenció. El republicano adelantó que mantendrá contacto con la OTAN y con el presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, para seguir coordinando la postura de Washington.

 

El clima distendido incluyó gestos diplomáticos: la llegada con alfombra roja, un apretón de manos ante la prensa y la invitación de Putin para que la próxima cumbre se realice en Moscú.

 

Aunque el encuentro no derivó en un pacto de paz, sí marcó un cambio en el tono de la relación bilateral. Según fuentes rusas, las conversaciones fueron “excepcionales” y “funcionales, con foco en resultados”. El propio ministro de Defensa ruso, Andrey Belousov, aseguró tras la reunión que se sentía “excelente”.

 

El mundo, mientras tanto, observa con cautela. El presidente Zelensky reclamó haber sido marginado del cónclave y advirtió que no se puede hablar de la paz sin la participación de Ucrania.

 

Por ahora, Alaska 2025 quedará como el punto de partida de un intento de distensión entre Washington y Moscú, aunque todavía muy lejos de un acuerdo definitivo para poner fin a la guerra en Europa del Este.

OPINÁ, DEJÁ TU COMENTARIO:
Más Noticias